Propiedades de la piedra Granate
Historia de la piedra granate: el término «granate», que proviene del latín «malum granatum», literalmente fruta granulada, se refiere a la granada. De hecho, los granos de granada, con su flamante color, evocan claramente estas piedras.
En Roma y Grecia, al igual que en el antiguo Egipto, la piedra granate se esculpía con precisión y se le daba formas de animales o rostros.
En la Biblia se dice que Noé dirigió su arca, en total oscuridad, a la luz de una linterna de la piedra granate.
Los vikingos utilizaba la piedra granate durante las solemnidades funerarias, pues creían que esta gema tenía el poder de conducir a los muertos a su paraíso, el Valhalla.
Los mayores países donde se extrae piedra granate en la actualidad son Tanzania, India y Madagascar. También hay otros yacimientos en Rusia, Mali, Canadá, Brasil.
Características de la piedra granate
La palabra granate hace referencia al color rojo de este mineral, que es en realidad la tonalidad más común. Sin embargo, también se pueden encontrar granates de otros colores, como el púrpura, el verde, el marrón y el amarillo.
Por ejemplo, la piedra granate de Mozambique es rojo, mientras que el de Malaya es naranja. Sólo el color azul no está representado en esta colección de piedras granates policromadas.
Existen incluso variantes versicolores, aunque muy raras, que se extraen en algunos yacimientos de Madagascar, y cuya piedra cambia de color a la luz de las velas.
Virtudes de la piedra granate
La piedra granate se considera con frecuencia un mineral de transformación, e incluso de metamorfosis. Se dice que tiene el poder de ayudar a superar los obstáculos, sublimar la pasión amorosa y regenerar la energía sexual.
A nivel físico
Considerado como una gema de la sangre, la piedra granate es un excelente medio para tonificar el corazón, purificar la sangre eliminando las toxinas, regular la circulación sanguínea y tratar la anemia. Esta piedra tiene la capacidad de curar la hipotensión, los abscesos y los granos, las inflamaciones y las enfermedades dérmicas. Gracias a su poder antiinflamatorio, también es muy eficaz contra diversas esclerosis, osteoporosis, fracturas óseas, artritis, reumatismo y artrosis. También puede aliviar el dolor en la columna vertebral.
La piedra granate también tiene la capacidad de revitalizar el hígado, el bazo y los riñones. Ayuda a fortalecer los vasos capilares y es eficaz para superar los zumbidos de oídos.
Puede estimular los órganos reproductores, desarrollar la potencia sexual y preservar las partes sexuales de diversas enfermedades contagiosas.
A nivel emocional/espiritual
La piedra Granate puede darte alegría y fuerza para vivir. Es capaz de generar coraje, proporcionarle energía, darle confianza en sí mismo. Tiene la capacidad de desarrollar la confianza en tí mismo, de ayudarte a tener éxito en tu negocio. Tiene la virtud de agudizar tu voluntad y cultivar en ti el sentimiento de poder.
Calificada como piedra de valor, te ayuda a recargar tu fuerza interior para superar los obstáculos y alcanzar tus objetivos. La piedra granate rojo te da la confianza, la determinación y el vigor para superar las dificultades cotidianas.
La piedra granate rojo es una gema calmante, que podría desarrollar en usted sentimientos de calma y serenidad, donde sólo había preocupación e inquietud.
Es una sorprendente piedra de anclaje que ayuda a distanciar las depresiones y la desesperación causadas por los fiascos y sacudidas que la vida puede poner en el camino de una persona.
La piedra granate te ayuda a deshacerte de los sentimientos de persecución.
También tiene la virtud de cultivar en ti el amor a los demás, de hacerte compasivo al animarte a escuchar las quejas de los demás y a comprenderlos sin juicios de valor.
Purificación y carga de la piedra granate
Ya sea en forma de colgante, pulsera, piedra rodada o en bruto, la piedra granate debe ser purificada y recargada para que pueda volver a aportarle sus beneficios.
En efecto, al cabo de un tiempo, la piedra granate habrá agotado toda la energía que contenía y deberá reconquistar las energías naturales.
Para ello, basta con purificarla asiduamente cada 7 u 8 días, pasándolo por agua corriente o sumergiéndola en agua destilada salada.
A continuación, debes recargar la piedra exponiéndola al sol sobre una pila de cuarzo, o en una geoda de amatista, o bien en una tabla de purificación: la tabla PuriDyna.
Acuérdate siempre de purificar y recargar una piedra cuando te la acabas de apropiar para eliminar las vibraciones anteriores.